Desarrollo del primer biofertilizante en Chile compuesto por bacterias aisladas de relaves mineros, capaces de tolerar altas concentraciones de cobre. Esta tecnología promueve el crecimiento vegetal en suelos agrícolas afectados por la lixiviación de cobre, reduciendo la dependencia de fertilizantes convencionales y contribuyendo a la biorremediación y recuperación de suelos contaminados. En pruebas experimentales, ha demostrado aumentar significativamente el crecimiento de plantas de tomate variedad ACE 55.